Las Baladas de Derek Bailey son una interpretación sorprendentemente hermosa y accesible, aunque con un marcado carácter bailleyesco, de los estándares clásicos del jazz. Aprecio sobretodo los nuevos enfoques que encontró en melodías familiares y las encantadoras melodías que extrajo de su guitarra. Asi, el álbum es una excelente, aunque poco convencional, puerta de entrada a su singular arte improvisatorio.