Una masterización absolutamente magnífica, detallada, aireada y abierta, con un amplio escenario sonoro. Los metales suenan excepcionales. Es un verdadero placer escuchar al fabuloso Tubby Hayes (tenor sax) y Donald Byrd (trumpet) junto a Dizzy Reece (trumpet) recibir el tratamiento de Tone Poet. Realmente, uno de los Tone Poets esenciales (9/10).